Eso convierte al mercado bajista del S&P 500 que comenzó a fines de febrero en el más corto de su historia. Desde el cierre mínimo del 23 de marzo, el S&P ha registrado su mayor ganancia en un período de 103 días en 87 años, según datos de Refinitiv.
Dos fuentes cercanas al ministro de Economía de Brasil, Paulo Guedes, dijeron a Reuters que el funcionario no tiene intención de renunciar, en un intento de sofocar las crecientes especulaciones de que la presión política por más gasto público podría obligarlo a dimitir.
El alza histórica del S&P 500 corona un fuerte repunte de 51,5% que comenzó a finales de marzo. El indicador, que funge como referente para muchas de las acciones que conforman la parte central de los planes de retiro — 401 (k) —, acumula ahora ganancias del 5% en lo que va del año.
Las acciones vinculadas al segmento de tecnología alentaron el lunes al Nasdaq en Wall Street a cerrar en máximos históricos, mientras que el S&P 500 coqueteó con sus propios récord, ya que los inversores se volcaban al sector que ha mostrado mayor resiliencia durante la crisis del coronavirus.
Las monedas de América Latina cayeron el lunes a medida que aumentan los casos de coronavirus en la región, con la divisa peruana en mínimos del 2002, mientras la mayoría de bolsas de valores cerraron al alza en línea con los mercados de Wall Street y China.
El oro avanzó hasta un 2,5% el jueves, repuntando de mínimos de casi tres semanas de la sesión previa, debido a la debilidad del dólar y después de que una lenta recuperación del mercado laboral en Estados Unidos reforzó el golpe económico generado por la pandemia de coronavirus.
El índice amplio S&P 500 superó durante la sesión su nivel récord de cierre de 3.386,15 unidades del 19 de febrero, justo antes de que los inversores vendieran acciones en previsión de lo que resultó ser la mayor caída de la economía de Estados Unidos desde la Gran Depresión.
En las operaciones de la tarde, el referencial superó brevemente su nivel récord de cierre de 3.386,15 unidades del 19 de febrero, antes del inicio de la crisis del coronavirus en Estados Unidos que causó uno de los desplomes más dramáticos en la historia de Wall Street.
Wall Street cerró con una baja el martes, con lo que el S&P 500 y el Dow Jones rompieron una racha de ganancias de siete días tras una caída al final de la sesión debido a la creciente incertidumbre por el estancamiento en Washington de las negociaciones para alcanzar un acuerdo de estímulo fiscal.
Los futuros del índice global S&P 500 de Estados Unidos alcanzaron un máximo histórico el martes, mientras que las acciones mundiales tocaron su mayor nivel en cinco meses y medio, impulsadas por la expectativa en que se apruebe pronto un nuevo paquete de estímulos.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, dijo el lunes que las empresas de China y otros países que no cumplan con los estándares contables serán excluidas de las bolsas de estadounidenses a partir de fines de 2021.
El índice Nasdaq cerró en baja el viernes, debido a que datos mostraron una fuerte desaceleración del crecimiento del empleo en Estados Unidos y los inversores temían que los legisladores no logren un acuerdo sobre un nuevo paquete de estímulo fiscal para enfrentar la crisis del coronavirus.
Un reporte del Departamento del Trabajo de Estados Unidos mostró que las nóminas de pago no agrícolas crecieron en 1,76 millones en julio, mucho menos que el récord de 4,8 millones anotado en el mes previo, lo que provocó un repunte del dólar.
Los mercados de acciones mundiales y el rendimiento de los bonos del Tesoro caían el jueves, mientras los inversores esperan un acuerdo en Estados Unidos que alivie el impacto de la pandemia de coronavirus y débiles reportes de ganancias corporativas lastraron a las bolsas europeas.
Los mercados de acciones mundiales y el rendimiento de los bonos del Tesoro caían el jueves, mientras los inversores esperan un acuerdo en Estados Unidos que alivie el impacto de la pandemia de coronavirus y débiles reportes de ganancias corporativas lastraron a las bolsas europeas.
Los pedidos por transporte, que en el pasado eran responsables de casi dos tercios de los ingresos de Uber, aumentaron en 5 puntos porcentuales desde el mínimo que tocó en abril, pero las reservas brutas se mantuvieron un 75% por debajo frente a igual lapso del año pasado.
Las acciones de Walt Disney Co se dispararon un 8,8%, en una rueda en la que alcanzaron un máximo en más de cinco meses, tras conocerse que el declive de sus ingresos en sus redes de parques y medios no fue tan negativo como se esperaba.
El oro trepó a un récord máximo el martes y Wall Street subía levemente, ya que los demócratas y la Casa Blanca parecían más cerca de acordar nuevas medidas de estímulo para ayudar a una economía golpeada por el coronavirus.
Los principales índices de Wall Street cerraron al alza el martes luego de una sesión volátil, impulsados por las acciones de Apple y de empresas de energía, mientras los inversores esperan nuevos estímulos del Gobierno de Estados Unidos para lidiar con las consecuencias económicas del COVID-19.
El S&P 500 sumó el lunes 0,7% a su racha positiva de los últimos cuatro meses, y las grandes compañías tecnológicas encabezaron nuevamente los avances. El indicador subió 23,49 unidades hasta las 3.294,61, para ubicarse a menos del 3% de su máximo histórico por primera vez desde febrero.
