Fuertes lluvias y vientos azotaron el noreste de Estados Unidos el lunes por segunda vez en una semana, provocando advertencias de inundaciones, cortes de electricidad, cancelaciones de vuelos y cierres de escuelas.
Pekín se despidió este viernes de las nevadas que han azotado la ciudad en los últimos días, pero el pronóstico de fuertes vientos y descensos de la temperatura provocaron la emisión de advertencias de hielo en carreteras y esfuerzos de gestión urbana para evitar contratiempos.
Las escuelas y carreteras cerraron y algunos servicios de tren fueron suspendidos el miércoles debido a la tormenta de nieve que azotó partes del norte y el centro de China por segunda vez esta semana.
Una combinación de fuertes lluvias, nieve y viento ocasionó amenazas de inundaciones y cortes de energía eléctrica al noreste de Estados Unidos el lunes, parte del mismo sistema de tormentas que mató a seis personas en Tennessee, donde los tornados derribaron casas.
La nieve caída durante la noche en buena parte del norte de China obligó a cortar carreteras y a suspender clases y trenes el lunes.
Los trabajadores de emergencias y los miembros de la comunidad iniciaron el domingo las labores de limpieza luego de las tormentas y tornados del fin de semana que enviaron a decenas de personas al hospital, causaron daños en edificios, volcaron vehículos y dejaron sin luz a cientos de miles.
La capital rusa vive desde ayer la mayor nevada en 145 años, que ha dejado en doce horas un manto de hasta 40 centímetros de nieve en algunos barrios, mientras Siberia se prepara para afrontar temperaturas de hasta 50 grados bajo cero.
Una tormenta dejó caer una mezcla de lluvia y nieve en partes de Nueva Inglaterra y algunos lugares registraron más de 15 centímetros (medio pie) de nieve el lunes, dejando sin electricidad a decenas de miles de personas y provocando carreteras resbaladizas.
Fuertes lluvias y vientos azotaron las costas sur y este de la India el lunes y los estados estaban en alerta máxima después que una profunda depresión sobre la Bahía de Bengala se intensificó hasta convertirse en una poderosa tormenta, informaron las autoridades.
"Según la base de datos local de escenarios de tsunamis, se esperan olas con alturas de más de un metro por encima de las mareas normales y que pueden ser más altas en bahías y estrechos cerrados. Se espera un tsunami destructivo, con olas de una altura que supone un peligro para la vida".
El martes se esperaba que hubiera tornados en el Mar Negro, día siguiente de que una tormenta dejara a más de dos millones de personas sin electricidad en Crimea, Rusia y Ucrania. Un centro de estudios dijo que el mal tiempo también había afectado a las operaciones militares rusas.
La fuerte tormenta en Rusia y en zonas ocupadas de Ucrania ha dejado cuatro muertos y a dos millones de personas sin electricidad, informaron el lunes las autoridades y medios rusos.
Más de medio millón de personas estaban sin luz en Crimea, Rusia y Ucrania después de que una tormenta en el Mar Negro inundara carreteras, arrancara árboles y derribara tendidos eléctricos, según indicaron la agencia estatal rusa de noticias y el Ministerio ucraniano de Energía.
Primero, varias familias huyeron de la sequía y la violencia. Ahora dicen que no tienen dónde esconderse de las intensas inundaciones al tiempo que las lluvias exacerbadas por el fenómeno climático de El Niño azotan gran parte de Somalia.
Los estadounidenses celebran este jueves el Día de Acción de Gracias con medidas de seguridad reforzadas y una gran tensión por el conflicto entre Israel y Hamás en Gaza, que podría ensombrecer unas fiestas normalmente alegres.
Cada año, el cuarto jueves de noviembre en Estados Unidos y Canadá se celebra el Día de Acción de Gracias (thanksgiving) por causas religiosas y culturales.
Este fin de semana de Acción de Gracias viajan más estadounidenses que en cualquier otro momento desde la pandemia, pero muchos tendrán que capear tormentas el miércoles antes de llegar a sus destinos, donde les espera un día de familia, fiesta y fútbol americano.
Este fin de semana de Acción de Gracias viajan más estadounidenses que en cualquier otro momento desde la pandemia, pero muchos tendrán que capear tormentas el miércoles antes de llegar a sus destinos, donde les espera un día de familia, fiesta y fútbol americano.
En la costa oeste de Florida, a unos 80 kilómetros de Tampa, se erige Babcock Ranch, una comunidad que se define como "la ciudad del futuro", ya que es autosuficiente y capaz de hacer frente a una "crisis climática en aumento", incluidos los devastadores huracanes.
Las autoridades de los estados de Santa Catarina y de Río Grande del Sur, en el extremo sur de Brasil, han confirmado la muerte de al menos siete personas a consecuencia de las intensas lluvias que han azotado la zona en los últimos días, desde el fin de semana.
