El oro se apreció el lunes ante la debilidad del dólar, lo que hizo al lingote atractivo para tenedores de otras divisas, mientras los inversores buscaron refugio frente a una caída de los mercados bursátiles globales antes de una reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos.
A sólo dos días de que probablemente la Reserva Federal suba las tasas de interés por cuarta vez en el año, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su máximo asesor comercial desataron sus críticas sobre el endurecimiento monetario del banco central.
Wall Street caía un 1 por ciento el lunes, lastrado por las acciones de firmas de cuidado de la salud tras un dictamen judicial que calificó de inconstitucional el Obamacare, situación que aumentó el nerviosismo entre unos inversores ya preocupados por la desaceleración del crecimiento mundial.
Las recientes corrientes vendedoras en los mercados financieros mundiales son probablemente las primeras de muchas, ya que los inversores se están acomodando a un mundo con condiciones monetarias más estrictas y a la amenaza de una recesión económica.
Los precios del oro cayeron el viernes a mínimos en una semana y registraban su mayor declive semanal en más de un mes, presionados por un dólar fortalecido tras sólidos datos económicos de Estados Unidos y antes de la reunión de la Reserva Federal la próxima semana.
Las preocupaciones respecto al crecimiento económico global volvieron a pesar el viernes sobre la bolsa brasileña, que terminó la semana en baja mientras los inversores esperan la última reunión del año de la Reserva Federal.
El peso de Argentina bajó el jueves por coberturas en dólares alentadas ante una mayor liquidez imperante en el mercado, tras recientes sobrantes en licitaciones de letras, a lo que se sumó el repunte global de la divisa estadounidense, dijeron operadores.
El índice S&P 500 cerró con cambios mínimos después de una sesión volátil en la que los inversores, cautos ante cierta incertidumbre tanto en el plano doméstico como el internacional, favorecieron a sectores defensivos y el principal lastre provino de los sectores financiero y consumo discrecional.
El oro retrocedía el jueves mientras los mercados de acciones subían por tercer día consecutivo, pero el precio del metal se movía en un rango estrecho de 6 dólares antes de la reunión de la Reserva Federal de la próxima semana.
El Banco Central Europeo puso fin oficialmente el jueves a su generoso esquema de compra de activos, pero prometió que seguirá alimentando el estímulo en una economía que está lidiando con una inesperada desaceleración y agitación política.
La libra subía el miércoles desde mínimos de 20 meses, dado que los operadores apostaban por la supervivencia del gobierno de la primera ministra británica, Theresa May, a una moción de censura, lo que le permitiría salvar su acuerdo de Brexit.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el martes que sería un error si la Reserva Federal sube las tasas de interés la próxima semana, como esperan los mercados, continuando con sus críticas hacia el banco central estadounidense.
La libra caía a su nivel más débil en casi un año y medio frente al dólar el lunes porque la primera ministra británica Theresa May pospuso una votación parlamentaria sobre su acuerdo para el Brexit, reavivando las dudas sobre cómo será la salida del Reino Unido la Unión Europea en marzo.
La Bolsa de Brasil cayó el viernes, arrastrada por las fuertes bajas de Wall Street y temores por la economía de Estados Unidos luego de la divulgación de datos laborales en ese país peores a lo esperado.
Los principales índices de Wall Street cayeron el viernes más de un 2 por ciento, en una liquidación amplia liderada por los declives en grandes firmas de internet y tecnológicas, con lo que acumularon su mayor caída semanal desde marzo.
El banco central de Estados Unidos está sugiriendo un punto de inflexión de su política monetaria, después de que una funcionaria de la Reserva Federal respaldó el viernes nuevas alzas de las tasas de interés en el "corto plazo", pero señaló que cada vez hay menos certeza hacia el futuro.
El índice S&P 500 y el Promedio Industrial Dow Jones cerraron el jueves con leves pérdidas en una sesión volátil, tras el arresto de una alta ejecutiva china que avivó temores a nuevas tensiones comerciales entre Washington y Pekín.
El principal índice de acciones de Brasil cayó el jueves, antes de la publicación de un dato de empleo de Estados Unidos que podrá determinar los próximos pasos de la Reserva Federal en lo que se refiere a su política monetaria.
El nerviosismo porque los mercados de bonos de Estados Unidos indican una recesión inminente y una guerra comercial entre las dos principales economías del mundo que aún continúa hicieron que las acciones europeas se hundieran el miércoles, tras el derrumbe del 3 por ciento en Wall Street.
Una de las autoridades más influyentes de la Reserva Federal dijo el martes que espera nuevos aumentos de tasas de interés el próximo año ya que la economía de Estados Unidos está en "muy buena forma", reforzando el tono optimista de la Fed de cara a las crecientes dudas en los mercados financieros
