Un muchacho en una Casa de Juegos
El cuarto mandamiento de la Ley de Dios es: �Honrarás a tu padre y a tu madre.� Hemos de honrar y respetar a nuestros padres, Porque ellos nos han dado la vida, nos han traído a un hogar. vivimos en familia y, sobre todo, hay que honrarle, porque ellos son los representantes de Dios.