El hombre triste
Había una vez un muchacho que vivía en una casa grande sobre una colina. Amaba a los perros y a los caballos, los autos deportivos y la música. Trepaba a los árboles e iba a nadar, jugaba al fútbol y admiraba a las chicas guapas.
Había una vez un muchacho que vivía en una casa grande sobre una colina. Amaba a los perros y a los caballos, los autos deportivos y la música. Trepaba a los árboles e iba a nadar, jugaba al fútbol y admiraba a las chicas guapas.
Estamos hechos a imagen y semejanza de Dios. Esta es la verdad más fundamental y dogmática en la comprensión judeo-cristiana de la persona humana. Sin embargo, no se debe entender simplistamente, como un bello icono estampado en nuestras almas.
Jesús, aun siendo Dios, no quiso acaparar toda la atención. Antes bien, evocó al Padre y, humanamente hablando, se dio a la tarea de enseñar a los discípulos, aquella primera comunidad que continuaría con su obra en medio del mundo hasta los confines de la tierra como efectivamente ha sido.
Bienaventurado el político que trabaja por el bien común y no por su propio interés. Para vivir esta bienaventuranza, que el político mire su conciencia y se pregunte: ¿estoy trabajando para el pueblo o para mí? ¿Estoy trabajando por la patria? ¿Estoy trabajando para honrar la moralidad?
Desde el momento en que se habla de creación partiendo de la nada, estamos ya fuera del método científico, puesto que la nada no existe y por tanto no se le puede aplicar el método científico. Hace falta mucha fe para pensar que una masa de materia o de energía se pueda haber creado a sí misma.
En una de las visiones del Apocalipsis se nos habla de la Gran Ramera, que "fornica con los reyes de la tierra" y "embriaga a las gentes con el vino de su inmoralidad". Esta Gran Ramera es la religión adulterada, falsificada, prostituida, entregada a los poderes de este mundo.
Ser corderos en medio de lobos. Ese es uno de los grandes retos del cristianismo. Así lo mandó Jesús a sus discípulos y así lo practicaron ellos tras habérselo visto hacer a Él. Sin embargo, en otra ocasión, el Maestro nos invitó a ser astutos como serpientes a la par que sencillos como palomas.
lla Tradición ha declarado siempre que "los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados". Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso.
Cuando yo era chico me encantaban los circos, y lo que más me gustaba eran los animales. Me llamaba poderosamente la atención, el elefante. Después de su actuación, el elefante quedaba sujeto solamente por una cadena que aprisionaba una de sus patas a una pequeña estaca clavada en el suelo.
Para aquellas personas que no estén acostumbrados a esta terminología, conviene aclarar lo siguiente: Por sincretismo religioso se entiende la presunción de conciliar doctrinas o religiones diferentes, por ejemplo entre judíos, musulmanes y cristianos.
El problema de los valores es un problema moderno que ha sido abordado por filósofos como Scheler, Nietzsche, Windelband, Rickert, Wojtila, Weber, etc., pero que por la evanescencia de su específica naturaleza, resulta campo abierto y prácticamente inédito, para el discurso radical.
Hay quien confunde ser tolerante con una curiosa forma de arrogancia: le permito a usted que hable, pero no cometa el error de creer que va a servir de algo. Y reducen así la tolerancia a una simple cortesía, o a respetar un turno de palabra: hable usted, aunque no me interesa lo que vaya a decir.
El corazón desea mejoras importantes. No vale la pena arriesgar algo "seguro", con sus muchos límites, para lanzarse a algo que podría empeorar las cosas. Porque un cambio vale la pena sólo cuando nos libra de males y dolores del presente y nos conduce a mejoras para uno mismo.
En general, el dinero no parece colaborar mucho a sentirse feliz de modo estable. Tampoco la fama suele aportar mucho por sí misma. Es más, hay que ser muy maduro emocionalmente para saber digerir de forma adecuada el encumbramiento.
"La seriedad es la disposición de alma de una persona que está profundamente penetrada por la Fe Católica y que está penetrada, por tanto, de la gravedad de las cosas de la vida humana, cómo todo pasa, cómo todo se deshace y que, al final de cuentas, eterno es solo Dios, bueno es solo Dios.
La seducción del placer, mientras dura, tiende a ocupar toda la pantalla en nuestra mente. En esos momentos, lo promete todo, parece que fuera lo único que importa. Sin embargo, muy poco después de ceder a esa seducción, se comprueba el engaño. Se comprueba que no saciaba como prometía.
El exorcista afirma que identificar la figura bíblica del Anticristo con la del diablo es un error, ya que el "666" que menciona el Apocalipsis es número de un ser humano. Por lo tanto es un hombre que propaga el odio, la guerra y el mal. "Nerón, Napoleón, y Hitler, son un bosquejo del Anticristo.
En nuestro mundo actual no nos entendemos. Constantemente chocamos con personas que piensan un poco diferente a nosotros. Discutimos y fácilmente nos ofendemos. Toda nuestra cultura nos enseña que la ley de vida es la del más fuerte, que el orgullo de la persona es más importante.
El perdón como actitud es cosa de uno solo, el ofendido, que es el que tiene que perdonar y coincide con lo que se entiende por perdonar de corazón. Se trata de un perdón interior, no exteriorizado, que predispone y empuja al perdón en acto, pero no es el perdón en acto.
Se quiere construir una sociedad sin Dios, y sin Dios, el hombre no tiene futuro, y las consecias ya las estamos sufriendo y experimentando. Dios es el futuro de nuestra vida, a nivel personal y a nivel social. Si quitamos a Dios de la existencia humana, el hombre se queda sin horizonte.
En realidad, algunas frases expresan verdades a medias, o medias mentiras, o mentiras completas, o sugestiones atractivas pero carentes de seriedad. Además, en muchos casos, esas frases impiden pensar cuando son acogidas como algo ya definitivo, cuando la realidad es mucho más compleja.
El cardenal tenía fama bien merecida de culto y santo. Un día invitó a los protestantes a que fuesen a oírlo a la catedral, dónde expondría la doctrina católica referente a la eucaristía y probaría la innegable verdad de la presencia real y constante de Jesucristo en el Santísimo Sacramento.
Personajes que no hagan mal a nadie, por la poderosa razón que nunca han hecho nada, quizás habrá muchos que censurarán el no hacer, pero entre el hacer algo que hace daño y el no hacer, es preferible que no hagan nada, al menos no dañan a nadie.
En estos momentos, inicia una nueva cadena de eventos. Pido a Dios, humildemente, que esos eventos me hagan más bueno, promuevan la justicia, abran la historia humana a la belleza, y nos acerquen un poco al encuentro eterno con nuestro Padre de los cielos..
Se trata de enfrentar y aliviar el dolor, pero es preciso aceptar la parte de sufrimiento necesario para todo progreso humano integral. Estamos invitados a aceptar el sufrimiento y el dolor en nuestras vidas cotidianas; de esta manera nos abrimos a vivir la paz y a escuchar las llamadas de Dios.
Es necesario que desde los primeros años de vida los padres enseñen a cada uno de sus hijos, desde niños, a ser responsables y a enfrentar las consecuencias o bondades de sus propias decisiones. Así los padres tendrán la satisfacción de haber formado hijos responsables y maduros.
¿De dónde proceden las guerras y las contiendas entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, que luchan en vuestros miembros? Codiciáis y no tenéis; matáis, ardéis en envidia y no alcanzáis nada; os combatís y os hacéis la guerra.
Decía un viejo adagio que ?en la mesa y en el juego se conoce al caballero?. Y aunque ya haya llovido desde su formulación y hayan pasado muchas lunas, la sentencia conserva su perenne validez.
Es verdadero aquello de que "no hay mucha diferencia entre el vicio de engañar y el de ser engañado". O sea, el vicio de dejarse engañar o engañarse a sí mismo. Muchas veces la persona no quiere ver bien las cosas como son: pretextos, medias verdades, etc., todo menos reconocer como las cosan son.
La palabra diligencia procede del verbo latino "diligere", que curiosamente significa amar. Pero no un amar en general, sino un amar con delicadeza, con cariño. Es mucho más que el simple verbo, también latino, "amare", que es más general, y que abarca también amar cosas y animales.
Aunque permanezcan en el anonimato, quienes ayudan a la Iglesia tienen su historia de compromiso con la Iglesia, que sólo Dios conoce. Su decisión de ayudar a la Iglesia en sus necesidades nace sin duda de la gratitud por lo que la Iglesia hace a favor de los demás.
En el ser humano no hay épocas de celo que garanticen el ejercicio instintivo de la sexualidad, como sucede con los animales. El hombre ha de controlar su sexualidad, que no puede reducirse a una necesidad biológica, sino que debe responder a una libre decisión.
Un número importante de estudios muestran que las personas que disfrutan de amistades sólidas tienen vidas más largas y saludables que las que no las tienen. La amistad disminuye la presión arterial y el estrés, reduce el riesgo de caer en depresión y aumenta la longevidad.
Nobleza obliga. Mucho se sigue hablando de la exhortación apostólica postsinodal Amoris Laeitita y su discusión se ha centrado muchas veces solo en los puntos polémicos. Quisiera ir más allá de los numerales más álgidos y comentar el capítulo cuarto denominado "El amor en el matrimonio".�
En la tramitación de cualquier ley vital debería ser obligatorio el informe de un comité de ética independiente y que todos los parlamentarios deberían conocer para que su conciencia sea la que fundamente su voto y no el de la disciplina de partido.