Sobrevivientes del devastador terremoto y tsunami de Japón se apiñaban el sábado en refugios, mientras los rescatistas buscaban en un litoral destrozado entre casas y vehículos sumergidos y embarcaciones varadas.
Tres manifestantes murieron, entre ellos un niño de 12 años, y cientos fueron heridos el sábado en Yemen, donde los sublevados acusaron a la policía de haber utilizado gases tóxicos para dispersarlos.
Los rebeldes lanzaron el sábado antes del amanecer un ataque contra Malakal, la capital del Estado del Alto Nilo en el Sur de Sudán, dejando un saldo de 11 muertos, según un responsable local.
Un infiltrado palestino mató a puñaladas a cinco personas, entre ellos tres niños, tras ingresar a la vivienda de una familia judía en un asentamiento en Cisjordania en la mañana del sábado, dijo el Ejército israelí.
El último centro rebelde del oeste de Libia se preparaba para un ataque del Gobierno el sábado, y se veían signos de que la moral estaba fallando después de haber sido derrotados u obligados a retirarse en otras partes del país.
La comunidad internacional empezó a enviar equipos de emergencias el sábado para ayudar a Japón después de que el país sufriera un enorme terremoto y un tsunami. En tanto, Naciones Unidas envió un grupo para ayudar en los trabajos de coordinación.
Una fuga de radiación se filtró de un inestable reactor nuclear al norte de Tokio el sábado, dijo el Gobierno, luego de que una explosión voló el techo del edificio, un día después de un poderoso terremoto que remeció Japón.
El régimen del líder libio Moamar Gadafi desalojó los bolsones insurgentes que se mantenían aún en torno a las instalaciones petrolíferas en una ciudad portuaria clave, y mostró el sábado un creciente poderío y confianza militar días después de haber cañoneado sin tregua a los insurgentes.
Una explosión en una estación nuclear de energía eléctrica en Japón destruyó el sábado la instalación donde se encuentra el reactor y suscitó el temor de que éste pudiera caer en un riesgoso proceso de fusión por la avería que sufrió durante los violentos terremoto y tsunami en el noreste del país.
Japón emprendió el sábado con las fuerzas armadas una enorme operación de rescate para atender a los damnificados de la devastadora combinación de un terremoto y tsunami que causaron cientos de muertes.
Las fuerzas de seguridad de Yemen atacaron el sábado con gas lacrimógeno y disparos a miles de manifestantes antigubernamentales que llevaban un mes acampados en la plaza central de la capital, Saná, y la operación dejó al menos un muerto, dijeron médicos y testigos.
Miles de personas continuaban este sábado refugiadas aunque paulatinamente el gobierno iba desactivando la alerta de tsunami por el terremoto de la víspera en Japón, que causó solo algunos daños menores, informó el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter.
Un nuevo sismo de magnitud 6.8 se registró la mañana del sábado a la altura de la costa oriental de Japón, la misma parte pacífica devastada el viernes por un potente terremoto y un tsunami, indicó el Instituto Geofísico de Estados Unidos.
El potente terremoto y el tsunami que devastaron el viernes el noreste de Japón han dejado casi 1,400 muertos y desaparecidos, según un balance actualizado este sábado por la policía y que se agrava de hora en hora.
Más de 215,000 personas fueron evacuadas a refugios en el norte y este del país después del violento sismo, seguido de tsunami, registrado el viernes en Japón, anunció este sábado la policía.
Decenas de miles de soldados a bordo de aviones o de barcos se dirigían este sábado al noreste de Japón par ayudar a los sobrevivientes del peor sismo registrado en el archipiélago y de un tsunami consecuente, que han dejado casi 1,400 muertos y desaparecidos.
Se ha confirmado la muerte de por lo menos 703 personas en el fortísimo sismo de magnitud 8.9 y el posterior maremoto que devastaron a Japón el viernes, pero este sábado el gobierno nipón señaló que se teme la muerte de más de 1,000 personas.
Una explosión se produjo este sábado en la planta nuclear de Fukushima N�1, en la región del noreste de Japón golpeada la víspera por un terremoto de magnitud 8.9 y un tsunami, provocando la caída de parte del edificio donde se encuentra el reactor y dejando cuatro empleados heridos.
Las fuerzas fieles al dirigente libio Muamar Gadafi lanzaron el sábado un ataque aéreo sobre un puesto de control en poder de los insurgentes en la localidad de Al Uqaila, al este de la ciudad petrolera de Ras Lanuf, comprobó un corresponsal de la AFP.
Trece personas murieron y al menos otras seis resultaron con heridas graves cuando un autobús volcó este sábado en una autopista en la zona del Bronx, en Nueva York, dijeron fuentes policiales.
Los países de América Latina con salida al Pacífico respiraban tranquilos este sábado después de que el tsunami provocado por un sismo de 8.9 grados en Japón llegara a sus costas con olas menores y sin causar grandes daños, lo que permitió levantar la alerta regional.
Los países centroamericanos se solidarizaron este viernes con Japón, que sufrió un potente terremoto que dejó centenares de muertos y desaparecidos, y provocó una alerta de tsunami en el Pacífico.
Las autoridades japonesas ordenaron la evacuación de los habitantes en una de 3 km de radio alrededor de la central nuclear Fukushima 2, afectada por problemas de enfriamiento, al día siguiente de un violento sismo.
El oleaje en el litoral del Pacífico centroamericano se mantuvo "normal" después de la hora en que se esperaba la llegada de un tsunami causado por el terremoto en Japón, y Guatemala y Panamá levantaron las alertas preventivas este viernes al anochecer.
Cinco israelíes de una misma familia murieron la noche del viernes al sábado por disparos de un palestino que logró infiltrarse en la colonia de Itamar, cerca de Naplusa (Cisjordania), indicó la web informativa israelí Ynet.
La compañía eléctrica japonesa Tokyo Electric Power indicó este sábado que liberó vapor radioactivo para reducir la presión anormalmente alta en un reactor de la central Fukushima 1, afectada por el violento sismo que devastó la región.
El potente terremoto y el tsunami que devastaron el viernes el noreste de Japón han ocasionado más de 1.000 muertos y desaparecidos, según un balance actualizado este sábado por la policía.
El tsunami provocado por un potente terremoto este viernes en Japón que dejó centenares de muertos, llegó a la costa de México y América Central con olas menores y sin dejar daños o víctimas.
El presidente estadounidense, Barack Obama, afirmó el viernes que la comunidad estaba "apretando la soga" sobre Muammar Gaddafi, pero rebeldes libios dijeron que su insurrección de tres semanas podrían fracasar sin una zona de exclusión.
Los alertas de tsunami provocadas tras el terremoto que golpeó Japón pusieron a prueba el viernes los usualmente precarios sistemas latinoamericanos de advertencia y dejó en evidencia que ante estas emergencias predominan la improvisación y el sentido común.
La popularidad de Estados Unidos descendió en la mayoría de los países árabes respecto al inicio del mandato del presidente Barack Obama en 2009, según un sondeo de Gallup publicado este viernes y que fue realizado antes del inicio de las protestas en Oriente Medio.
El potente terremoto y el tsunami que devastaron el viernes el noreste de Japón han ocasionado más de 1.000 muertos y desaparecidos, según un balance actualizado de la policía.
El tsunami provocado por un potente terremoto este viernes en Japón que dejó centenares de muertos, llegó a la costa de América Latina por México con olas inferiores a un metro y sin dejar daños o víctimas.
Japón sufrió este viernes el peor terremoto jamás registrado en el archipiélago, de magnitud 8,9, seguido de potentes réplicas y de un tsunami que dejaron centenares de muertos y desaparecidos y afectaron a la central nuclear de Fukushima.
El ministro del Interior de Chile, Rodrigo Hinzpeter, dijo este viernes que se amplió la orden de evacuación a todas las "zonas costeras potencialmente inundables" del borde costero chileno de 4.000 km de extensión, por alerta de tsunami tras el sismo de 8,9 en Japón.
