La inversión extranjera directa (IED) en México subió 1,5% en la primera mitad del año, contra lo esperado, en medio de expectativas pesimistas, alentadas por la fuga de capitales en el mercado de bonos gubernamentales y la desaceleración económica.
La tasa de informalidad alcanzó su máximo histórico al abarcar al 56,3% de la población ocupada en el segundo trimestre del año, lo que representa un aumento anualizado del 1,6%, de acuerdo con un informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Cerca de 5,5 millones de empleos en México estarán en peligro en los próximos 10 años, a causa de la automatización en las empresas, de acuerdo con el dramático pronóstico del Banco de México (Banxico, central).
Al menos unos 8,500 millones de dólares invertidos en valores gubernamentales se fugaron de México en los últimos seis meses debido a la desconfianza de los inversores en el futuro del país, a pesar de las altas tasas de interés imperantes.
El cierre de esta jornada es casi 8 dólares abajo de lo estimado por el Gobierno en los Criterios Generales de Política Económica 2019, donde se presupuestó un barril de 55 dólares.
La mezcla mexicana de exportación se mantuvo a la baja este martes y retrocedió 1.63 dólares, para quedar en 50.69 dólares el barril, nivel que no se registraba desde el 14 de enero de este año, cuando cotizó en 50.61 dólares.
La Cruzada contra el Hambre, una de las apuestas más emblemáticas lanzadas por el gobierno del ex presidente Enrique Peña (2012-2018), resultó en un clamoroso fracaso.
Bajo la amenaza de EU de imponer aranceles, el presidente mexicano se comprometió a hacer que su país sea menos dependiente de la demanda estadounidense, pero, en un giro irónico, las exportaciones a su vecino del norte han sido una de las pocas cosas que han frenado una recesión en México este año
Las nuevas regulaciones para democratizar las elecciones gremiales en México entraron en vigor, pero los sindicatos tienen cuatro años para acatar la medida que requiere votaciones secretas en los contratos.
La voz del presidente Andrés Manuel López Obrador cuando habla de economía es calmada. “Vamos muy bien en lo económico”, repite siempre que tiene la oportunidad de abordar el tema.
La economía mexicana tomó un respiro y eludió, por ahora, la tan temida "recesión técnica" que la mayoría de los especialistas daban como un hecho, al registrar un ligero crecimiento durante el segundo trimestre del año, de acuerdo con cifras oficiales.
El gobierno de México anunció el viernes los fallos en los procedimientos de “invitación restringida” para el desarrollo de ingeniería y construcción de una polémica refinería de la estatal Pemex, con capacidad para procesar 340,000 barriles por día de crudo (bpd).
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales avaló el proyecto de construcción del nuevo aeropuerto para la Ciudad de México en la base militar de Santa Lucía, al norte de la capital, pero le exigió al gobierno tomar varias medidas para mitigar su impacto ecológico.
Un nuevo pronóstico a la baja del Fondo Monetario Internacional (FMI), que redujo la expectativa de crecimiento de la economía mexicana, enardeció al presidente Andrés López Obrador, quien despotricó contra el organismo y otras entidades de la comunidad financiera global.
El último informe de la Junta de Gobierno del Banco de México para revisar la política económica advierte que la desaceleración de la economía mundial podría afectar al país.
El proyecto para construir una nueva refinería en México es “irreversible”, aseguró el jueves la secretaria de Energía, en medio de cuestionamientos sobre el plan que, según el Gobierno, requiere de una inversión de 8,000 millones de dólares.
Un plan de negocios presentado por el gobierno de México para salvar a la empresa gubernamental PEMEX -la petrolera más endeudada del mundo- de la insolvencia y rescatarla del naufragio, desató reacciones de desencanto y suscitó reservas entre los especialistas.
En la conferencia matutina realizada en Palacio Nacional, el presidente de México respaldó el plan y precisó que se trata de un rescate de la industria energética del país, luego del rotundo fracaso de lo que ha sido la Reforma Energética.
El gobierno mexicano reiteró el martes que respaldará a la endeudada estatal Pemex con más capital así como con una reducción de impuestos, en momentos en que la petrolera se encuentra bajo la mira de las agencias calificadoras de riesgo.
México terminó de calibrar la fórmula utilizada para su programa de cobertura petrolera, dijo un funcionario de la secretaría de Hacienda, despejando un obstáculo importante para concretar una de las operaciones más grandes y secretas del mundo.
